1. Skip to Menu
  2. Skip to Content
  3. Skip to Footer

Las Iglesias españolas de ladrillo

No toda la plástica griega se incluye en los soberbios mármoles de Fidias, ya que al lado de las excelsas figuras partenonianas, resplandece la gracia de los humildes barros de Tanagra: así la Arquitectura española, dejando de lado las piedras catedralicias de Burgos, León y Toledo, se encarna en nuevas formas de arte, en los pobres ladrillos de Sahagún. (…) En los siglos X y XI, León, si no fue la capital en el sentido que hoy se da a este calificativo, era una ciudad importantísima en los territorios cristianos. Un poco más al norte, Astorga había quedado poblada por una colonia de moros bereberes (los ascendientes de los actuales Maragatos). En la 10ª centuria, los monjes fugitivos de Córdoba, aportaron grandes influencias mozárabes y mahometanas y bajo su imperio, levantan y reconstruyen iglesias y monasterios (Escalona, Mazote, Eslonza, Castañeda, Sahagún, etc, etc.). Pero en el éxodo de estos mozárabes, los acompañan muchos industriales, entre los que citan las historias, una colonia de mazarifes (ladrilleros), pobladores del lugar de Quintana, cerca de Sahagún. Ya en el siglo XI, los monjes benedictinos, ampliaron el famoso monasterio, creando un centro de vida donde convergieron extranjeros de todas clases y procedencias y muchos moros que Alfonso el Batallador envió a Sahagún como elementos de venganza contra su mujer doña Urraca y contra los monjes. Todos estos apuntes sirven para componer el cuadro del arte leonés en el que bajo influencias tan diferentes, aparece una arquitectura de ladrillo románico – mozárabe – mudéjar, de gran valor. Sin duda los orígenes son esencialmente cristianos, pues hay que tener en cuenta, que empezaba el siglo XI cuando Alfonso V levantaba la basílica de San Isidoro en León, de luto et latere, frase documental que prueba la existencia de una escuela arquitectónica de ladrillo, perteneciente seguramente al estilo latino-bizantino, en sus últimas manifestaciones. Y siendo este material el propio de las arquitecturas populares, es natural que con él se construyeran edificios en el estilo románico. Allí están para probarlo, los restos de la antigua iglesia del Monasterio de Sahagún, y más enteras y elocuentes las de San Tirso y San Lorenzo, ambos de estilo románico de ladrillo, con elementos, influencias y rastros mozárabes y mudéjares, difíciles de diferenciar: estilo que debe llamarse Sahagunino, por ser Sahagún su raíz y centro. San Tirso, el prototipo del estilo, en los ejemplares existentes, nos oculta su historia. Es una iglesia mozárabe anterior al monasterio benedictino? Es una construcción románica de ladrillo, algo posterior a aquel? Sería inoportuna la discusión: lo importante, es señalar la perfecta analogía de los ábsides románicos de piedra con arquerías ciegas superpuestas y las de San Tirso, que son exactas traducciones de aquellas formas, al ladrillo. San Lorenzo es la subdivisión de fajas, impostas y arquillos, revela una mano mahometana, acostumbrada al dominio del detalle sobre el conjunto: pero el espíritu (la disposición) es esencialmente románica. Aquí empieza la arquitectura que podríamos llamar aljamiada, ya que expresa ideas cristianas, con palabras (formas) mahometanas. Un elemento característico de la arquitectura sahagunina, es la torre cuadrada, ligeramente piramidal, sobre el crucero, elemento que no tienen las iglesias mudéjares aragonesas, andaluzas o toledanas. No es viable la adaptación al ladrillo de las líneas de piedra de los monumentos románico-bizantinos?. El estilo de Sahagún se expande por la región. A las puertas de la ciudad, San Pedro de las Dueñas, es un notable ejemplo de la escuela. (…) Junto a los ejemplares del Arte de ladrillo más arcaico y cristiano, otros hacen las exquisiteces esencialmente mudéjares en la misma villa de Sahagún. Esto es debido a una influencia directa toledana-andaluza, transportada a la región en el siglo XIV por D. Pedro I de Castilla, San Francisco de Sahagún contiene elementos de puro arte mahometano, prolongándose de este modo la unidad de este arte, a través de los siglos y las distancias. Vicente Lamperez, Arquitecto”.

Share

Conoce mejor Sahagún